domingo, 15 de abril de 2012

Arde, Miguelito

Al parecer Luis Carlos le debía a Miguel más de cuatrocientos euros. Una familiaridad excesiva y el temor a parecer avaro o desconfiado delante de los clientes habían ido engendrando... bla bla bla, bla bla bla, bla bla bla...

Sí, era muy malo. No sé cómo no me di cuenta antes. Con mucho gusto le meto fuego y aquí no ha pasado nada.

6 comentarios:

SBP dijo...

El terror de cualquier hermana... A este Luis Carlos sólo le faltaría ser guapo...

SBP dijo...

¿Qué haces, insensatoooo? A mí me gustó. Me sentí identificada con Miguel. Yo he fiado, confiando, sintiendo la desconfianza crecer en quien te debe, perdiendo la amistad por el apuro del otro, ¿habrá algo más incongruente? Quizás faltaba describir esa parte, pero no todo cabe en un post. Guárdatelo de atrezzo para un historia más completa (yo lo haría). Un abrazo.

C. B. dijo...

Gracias por tus palabras. Tomo nota y seguiré tu consejo.

Jordi dijo...

Pues es un empiece prometedor. Me encanta lo de "al parecer..."

M. dijo...

Me había gustado la "pura especulación"; ahora los bla bla blas. Saludos.

C. B. dijo...

Sí, creo que queda mucho mejor así, los bla bla blas lo dicen todo. Un saludo, cronopio.